Era cuestión de tiempo y de fuerzas. Ambas se acabaron.
Ripley no sabe que decir, nació enfermo pero superó con éxito la primera semana de vida pues en esos días se pudo presentar la enfermedad y no lo hizo como tampoco en la adolescencia segundo momento clave y pudo vivir en perfectas condiciones físicas durante 38 años, no sería hasta uno después cuando empezaron los síntomas pero pasaría un lustro antes de que los médicos supieran lo que le ocurría y todo este tiempo, hasta los recientes 50 ha estado luchando y batallando mas allá de lo posible con enormes altibajos emocionales además de ver y sentir el progresivo e imparable deterioro de sus capacidades y como el cuerpo iba dejando de funcionar.
Sabe que todo lo que tenía que hacer en la vida ya está hecho, exactamente igual que le sucediera a su madre quien murió a los 46 años de edad, desde ese día Ripley supo que iba a morir joven y lo interiorizó tanto que seguramente esa sea la razón por la que nunca ha temido a la muerte.
Va a reunirse con ella.
Ahora os hablo en primera persona, jamás pensé que esto de la fotografía y los blogs pudiera cobrar tanta importancia en mi vida, aunque lo explique mil veces nunca podréis entender que han sido el soporte que me ha mantenido a flote durante estos larguísimos años de pelea, ocurre que ya no se puede mas. En la vida una actividad me ha tenido ocupado y entretenido durante tantísimo tiempo, nunca hice nada que me proporcionara tanto bien y permitiera además, conocer excelentes personas y hacer mejores amigos. Con algunos tuve el privilegio de compartir momentos personalmente y con otros me queda el dolor de no poderlo hacer.
Quiero acordarme de Xuanrata, de Juan Carlos el de Béjar, de Mariluz, de Josh, de Campurrina y de Elena Arjona, de Ana por quien siento un cariño especial y Montse de Barcelona, de Miguel y de Antonia, de JuanRA diablo y de Esteban, de Helio e Ignacio Santana, de Merche e Isabel Membrado, de Jan Puerta, de Juan Nadie y de Rud cuyo hijo pequeño se encuentra muy grave y su vida pende de un hilo, espero que su juventud juegue a su favor y le permita salir adelante, también me acuerdo de "Mucha" y de Juan Carlos mi paisano a quien teniendo tan cerca no se nos ha ocurrido quedar a tomarnos algo y a todas las personas que se fueron quedando en el camino y cuyos nombres me es imposible recordar por mas que fuerce la memoria.
Tengo muchas fotos que me gustan e incluso había pensado dejarlas programadas pero no se, al final me pareció que no tenía demasiado sentido, he estado trabajando tratando de reunir las fotos de las que me siento mas orgulloso para ponerlas todas juntas pero no ha sido posible por una cuestión de tiempo y de organización. Pongo esta no se por qué, quizá por el cielo y su significado quizá porque explique que diablos hacía minutos antes fotografiándome en un ascensor.
Me voy queridos mios, estoy en paz con Dios y a ratos conmigo mismo.
Besos para ellas, abrazos para ellos y salud para todos.
Madrid 11 de Marzo de 19966 - idem 13 de Mayo de 2016.
La entrada me deja consternado.
ResponderEliminarUn abrazo allá donde estés.
Dioosssss. ¿Alguien puede verificar que esto es así? Que informe por aquí, por favor.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMadre mía! No tengo palabras.
ResponderEliminarDescansa, amigo Ripley.
Acabo de leerlo. Yo no sé nada. No he recibido noticias de Ripley estos últimos días y le he dejado un correo. Estoy preocupada. Mucho. Lo estamos todos.
ResponderEliminarYo no quiero pensar nada. No puedo. No quiero. Por favor, que alguien nos informe.
ResponderEliminarYo le he enviado un WhatsApp, pero no le llega...Esperaremos un poco más a ver si hay noticias...
ResponderEliminarGracias, Mariluz. Esperaremos. No nos queda otra.
ResponderEliminarConsternado y sin saber qué pensar...espero noticias y espero que sean buenas, porfa, amigo...
ResponderEliminarEl móvil da llamada, pero no contesta nadie...
ResponderEliminarEl fijo le ha dado de baja. Número inexistente.
ResponderEliminar¿Alguien por casualidad tiene su dirección?
ResponderEliminarSi alguién cercano a él puede darnos alguna información le estaría muy agradecida. Mi última comunicación con él fue mediante un email fechado el 9 de mayo.
ResponderEliminarUna entrada muy dura para los que compartimos afición con él. Sabemos de su enfermedad, pero no imaginamos una despedida de este modo.
ResponderEliminarSi alguien sabe algo mas se lo agradeceremos.
Yo no tengo su dirección, pero voy a hacer una gestión para ver que está ocurriendo.
ResponderEliminarEstuve hablando hace unos días con él con motivo de su petición a través de change.org y no noté nada raro, más allá de su permanente pesimismo.
Es inútil escribirle un whatsapp porque ha borrado el suyo. Me dijo que tenía otra mensajería, pero no recuerdo cuál es.
Voy a hacer una gestión, como diho..
Hola Jota Ele. Estaba pensando ti... que es el que quizá tenga más datos de él. El Whatsapp le utilizó el miércoles por última vez. ¿Alguien con Telegrama? Sé que también lo utilizaba.
EliminarAhora acabo de comprobar que el último comentario en mi blog está fechado el 11 de mayo y en el email que me envió el día 9 de este mes no le noté nada fuera de de lo corriente.
EliminarGracias, Jota Ele. No dejo de pensar en Ripley.
ResponderEliminarHe hecho la gestión y la Policía está haciendo las gestiones necesarias. Entiendo que, a través de sus teléfonos, podrán dar con su dirección. Si sé algo, os lo comunicaré.
ResponderEliminarLamentablemente tengo que comunicaros que la Policía ha encontrado esta tarde a Ripley muerto en su domicilio. La Policía me comunica que el juez levantaba el cadáver sobre las 18'00 horas en su domicilio de Madrid.
ResponderEliminarMe tiembla todo cuando escribo ésto. Creo que debemos rezar por su alma.
Rezaremos... y habrá que hacerle un pequeño homenaje blogero.
ResponderEliminarMis condolencias también para los suyos.
Me negaba a creer lo que había detrás de sus últimas palabras...desgraciadamente ya no podemos hacer otra cosa que rezar por su alma...que Dios lo acoja en su seno y encuentre la dicha que no pudo tener en esta tierra con su terrible enfermedad...siempre estará en nuestro recuerdo.
ResponderEliminarLo siento tanto, amigo...me extrañaba que no hubieses respondido a mi respuesta a tu último comentario en mi blog...y presentí que algo no iba bien...
ResponderEliminarTe echaré de menos...un enorme abrazo allí donde estés y mi cariño también para tu familia.
Estoy hablando con el Anatómico Forense...me acaban de decir que tiene que ir un familiar a hacer los trámites pertinentes y ya la familia decide a que tanatorio lo llevan, asi que, hasta mañana antes de las 10 de la mañana no se sabe a donde lo llevan
ResponderEliminarGracias Mayte y JL por informar. Estamos todos sin palabras...
ResponderEliminarEstoy tan alejado de los blogs... Me ttortura la idea de pensar que si llego a ver esta entrada esta mañana, quizás pudiéramos haber hecho algo.
ResponderEliminarAhora ya todo es inútil.
Yo espero que ahora encuentre la felicidad que le fue negada en vida.
Jota Ele, no podíamos hacer nada. No te tortures con eso. Muchas gracias por las gestiones.
EliminarUn abrazo.
Al menos habrá visto como esos amigos "lejanos" que tiene, han hecho todo lo que estaba en su mano, aunque no haya servido de nada.
ResponderEliminarFeliz viaje compañero. Ojalá encuentres allí donde ya estés todo aquello que anhelabas.
Por aquí se te recordará siempre.
· LMA · & · CR ·
Recibo con pesar la noticia a través de Juan-Carlos y lamento estar semi aislado y no poder de momento rendirte el homenaje de amistad que te mereces.
ResponderEliminarEspero que tu dolor ya esté olvidado y que la luz, esa luz de la que eras maestro brille para ti por toda la eternidad.
No mueres mientras aquí dejes amigos.
Allá donde estés recibe un fuerte abrazo. Hasta siempre Adolfo.
Sin palabras y con muchas lágrimas. Lágrimas de verdad, porque Ripley era de verdad. Sentimientos a flor de piel que le trajeron también por caminos complicados. Pero esa amargura se la provocaba su enfermedad. Esa pésima compañera de viaje. Este injusto destino que nunca creí llegase tan pronto. No quería creerlo. No podía. Pero también es injusto querer retenerte aquí, Ripley, con tanto sufrimiento. Un sufrimiento que sólo tú has conocido de verdad; en tus propias carnes, en tu alma susceptible, también debido a esta enfermedad. Estoy escribiendo con la vista borrosa. Sin pensar... Te echaré muchísimo de menos, mi querido Ripley.
ResponderEliminarEstoy temblando en este momento al enterarme de la noticia. Nunca imaginé este desenlace. La vida no le fue nada fácil. Creo que el amigo Ripley permanecerá siempre en el recuerdo de quienes hemos sido sus amigos, aunque fuera en el plano virtual. Descanse en paz.
ResponderEliminarQuerido, Adol. Voy a averiguar donde está ese ascensor y voy subir contigo a ese tejado y desde allí contemplaremos Madrid con todas sus antenas, sus calles viejas y esos edificios que tanto te gustaban. Dame un poco de tiempo, eso si. Ahora no tengo más palabras, solo un nudo en el pecho.
ResponderEliminarGracias a Jota Ele y a Mayte por sus gestiones. No puedo decir nada más. Tengo que salir a tomar aire.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMi particular y minúsculo homenaje a nuestro amigo Ripley A pulso como un campeón - Fotos de Cualquier Parte
ResponderEliminarBonita entrada, Juan Carlos.
EliminarGracias Mariluz.
EliminarJuan Carlos...
EliminarUn abrazo amigo, bonito detalle y lleno de respeto y admiración.
Quizá ahora ya vueles y, contigo, tus fotografías. Feliz vuelo. Feliz viaje.
ResponderEliminarJoder, sin palabras me he quedado. Hace poco tratando de recoger firmas para conseguir una bici y ahora... te echaré de menos Ripley. Siempre a pulso cómo un campeón.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarDespués de estar una hora hablando con Jota Ele y un ratito con Abi, puedo dejarte aquí Adolfo mis últimas palabras ya cuando tú no estás...me has dejado un correo que me quemará en el alma por el resto de mi vida...me estoy planteando abandonar el facebook, el blog y tantas cosas, esto me ha dado para replantearme tantas cosas...ese correo de tus últimas horas, o tal vez minutos...lo tenías todo preparado, no quisiste más soledad, más desilusiones y sobre todo no quisiste sentir los siguiente síntomas de tu cruel enfermedad. Te dije que ánimo, que la bici la conseguíamos, que si nos pedían 500 tendríamos 500 y que sino te la compraríamos entre todos...estabas vencido...espero que los tuyos sepan estar en los últimos momentos acompañándote.
ResponderEliminarMi abrazotedecisivo allá donde ya descanses, y no te olvides de hacer muchas fotos a pulso como un campeón.
Dejo aquí constancia de mi cariño y respeto.
ResponderEliminarUfff, tremendo, sabía que estaba mal pero no tanto.
ResponderEliminarUn abrazo compañero y espero que hayas encontrado el descanso.
Mis condolencias a toda su familia y amigos, lo siento mucho.
ResponderEliminarCuando suba... ire a buscarte.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo allí donde estés, amigo Ripley
ResponderEliminar¡No me lo puedo creer! Casi nos pisábamos los sitios que fotografiábamos y, como bien dice, nunca quedamos porque ya lo haríamos. ¡Qué pena! espero que ahora fotografíes todo allá donde pares... ¡a pulso, como un campeón! que decías en aquellas primeras fotos que vi en tu blog.
ResponderEliminarMe sumo al homenaje iniciado por algunos amigos blogueros, haciendo una entrada al respecto.
ResponderEliminarhttp://ventanadefoto.blogspot.com.es/2016/05/despedida-un-amigo.html
Estoy sin palabras.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo a toda su familia y amigos.
Hasta siempre, Adolfo.
Aunque no conocía a Ripley, rezo por su alma y que la familia tenga consuelo.
ResponderEliminarUn abrazo
Consternación, impotencia y tristeza...mucha tristeza por lo sucedido.
ResponderEliminarEn paz descanses Ripley.
Deseo que allí donde estés ahora sea más feliz ya que aqui te costo tanto. Será triste no recibir tus comentarios que esperaba con ganas.
ResponderEliminarHasta siempre querido Ripley.
No acertamos a entendernos.
ResponderEliminarMe deja consternado el mensaje y la valentía.
Ests donde estés, gracias por el testimonio.
Mi pequeño homenaje a Ripley, que quiero dejar también en su saloncito. Quizá nos lea desde algún lugar...
ResponderEliminarUn abrazo a todos.
Mi vida sin Ripley
Como el resto de compañeros, sin palabras...
ResponderEliminarAunque, si Adol estuviera observando el blog le saldría una especie de sonrisilla picarona, no se si os estáis dando cuenta de que ha conseguido reunirnos aquí a un montón de compañeros blogueros desde los inicios ;)
No se que decir... todavía no le había contestado a su último guasap...
Espero que tengas un buen viaje Ripley, vayas a donde vayas!!!
Biquiños, enormes ;)
Un homenaje más por mi parte. Todos serán pocos:
ResponderEliminarhttp://xuanrata.blogspot.com.es/2016/05/ripley-para-siempre-en-nosotros.html
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ResponderEliminarNunca logré relacionarme con él porque me exigía que las fotos fueran de tal o cual manera que consideraba de excelencia, y claro que no me acuerdo cuál era.
ResponderEliminarMe lo encontraba de paso por los blogs de algunos amigos, como Laura Rivera.
Te recuerdo Ripley, y eso ya es una plegaria, deseo que haya un cielo para los fotógrafos, y esa es otra. Y le pido a la Virgencita que te de consuelo
16 de mayo de 2016, 18:44
Me acabo de enterar y aún no lo puedo asimilar, estoy consternada. Ripley se ha ido, ahora ya ha dejado de sufrir y nos deja un vacío a los que le queremos. Él, valiente, afrontó su enfermedad hasta el ultimo momento y nos ha dado mucho, sus fotos y su carisma, a mi con sus comentarios me enseñó a hacer mejores fotos y a sentir que los pequeños males de la vida son poca cosa comparados con su sufrimiento de la terrible enfermedad que padecía.
ResponderEliminarEspero que allá donde estés recibas nuestro cariño.
Montse, no me extraña que estés consternada. Todos lo estamos. Tardaremos en asimilarlo. Yo, al menos, tardaré mucho. Sigo mirando la bandeja de entrada, por si me envía un correo allá donde se encuentre...
ResponderEliminarNo lo esperaba para nada. Ahora no. Me ha sorprendido tanto, que sigo paralizada con la noticia.
Acabo de enterarme de esta triste noticia y no tengo palabras... descanza en paz, Ripley, una oración para tí y tu familia.
ResponderEliminarAcabo de enterarme de esta triste noticia y no tengo palabras... descanza en paz, Ripley, una oración para tí y tu familia.
ResponderEliminarCuatro años llevo apartado del mundo bloguer. Ahora escribo estas palabras, que es lo mínimo que puedo hacer, en memoria a una persona excepcional. Lo noté ya en su primer comentario.
ResponderEliminarMe escribiste una vez que éramos almas gemelas, lo recuerdo perfectamente. No amigo. Nunca llegare ni por asomo a ser como tú...
Has dejado huella en muchas personas, y eso es muy grande. Donde quiera que estés, gracias por tus fotos, por tus palabras, por haber existido...
Joder!! :(
ResponderEliminarJoder!! :(
ResponderEliminarDespués de tres días ya he podido hacerle mi homenaje, quedará siempre en mis momentosdecisivos , espacio en el que él... fue tan decisivo . Enhorabuena a los que le habeis hecho ya el homenaje, me han gustado mucho todos. Todo esto va por ti Campeón.
ResponderEliminarhttp://sara-momentosdecisivos.blogspot.com.es/2016/05/hasta-siempre-ripley.html
Después de tres días ya he podido hacerle mi homenaje, quedará siempre en mis momentosdecisivos , espacio en el que él... fue tan decisivo . Enhorabuena a los que le habeis hecho ya el homenaje, me han gustado mucho todos. Todo esto va por ti Campeón.
ResponderEliminarhttp://sara-momentosdecisivos.blogspot.com.es/2016/05/hasta-siempre-ripley.html
Querido Ripley, estés donde estés descansa en paz amigo. Me enteré leyendo otro blog de tu despedida que has reflejado en tu blog, y entre una mezcla de tristeza y admiración me despido de tí. Hasta siempre!.
ResponderEliminarMe he quedado sin palabras, solo puedo decir que descante en paz. Que palo tan fuerte pega la vida.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarA ver si ahora sale bien... Me han mandado un comentario anónimo a mi blog con el siguiente enlace:
ResponderEliminarhttp://apulsoripley.blogspot.com Otro homenaje más... y ya llevamos unos cuantos. Este chico se hacía querer.
Gracias, Juan Carlos.
ResponderEliminarHola a todos...he intentado un par de veces dejar comentarios , pero no se que ocurre que no hay manera...lo intentare nuevamente...conoci a Ripley en los blog,algunos de vosotros me conoceis y yo recuerdo muy bien aquellos tiempos, lo pasabamos genial...por entonces Ripley nos hizo una de sus entrevistas y para mi fue genial...Hace unos dias mi gran amigo "Solazo" Jota Ele me lo comunico y la verdad me quede de piedra...sabia muchos años de su enfermedad, pero es un golpe duro...alli donde este que descanse en paz...Besos
ResponderEliminarPasaba por ahí, una vez y otra más, observaba y documentaba con su mirada, con la suya tan particular para mostrarlo en su blog, a nosotros,a sus enlaces o el que simplemente pasase por ahí, por su galería de imágenes de Madrid, pues él sabía muy bien que el ciclo creativo se cierra con el espectador y por eso lo compartía.
ResponderEliminarMañana tengo previsto estar por Madrid y me comprometo a pensar en Adol y sobre todo en observar esos momentos, detalles, lugares y rincones que tanto le gustaba fotografiar.
Mi más sincero adiós Adol.
Miguel.
Jolines....vengo de una leve intervención...y he vuelto a pasear por los blog..y me encuentro ésto...espero que sigas disfrutando desde arriba, con las cosas que realizamos...te mando un abrazo muy fuerte....no ha tenido que ser fácil, desde pequeñajo, como cuentas...espero que desde donde estés, puedas seguir haciendo fotos...nos veremos....
ResponderEliminarConsternado como todos vosotros al enterarme de esta infausta noticia, descansa en paz compañero blogero.
ResponderEliminarMis más sinceras condolencias a sus familiares y amigos.
Un abrazo.
Yo aún me sigo acercando por si aparece en algún momento...aunque sea, entre líneas...
ResponderEliminarEs cierto, mi querido Ripley. Tú no eras de ésos "de entre líneas".
Un beso hacia el cielo de Madrid.
Si desde algún sitio puedes leer mis palabras, te mando un beso y te deseo lo mejor allá donde estés. ¡Te echaremos de menos!
ResponderEliminarSi desde algún sitio puedes leer mis palabras, te mando un beso y te deseo lo mejor allá donde estés. ¡Te echaremos de menos!
ResponderEliminarMucho tiempo sin pasar por aquí y no era ésta la circunstancia que hubiera preferido para volver de visita, pero acabo de enterarme y es muy triste. Mis respetos a un bloguero admirado que "pasaba por ahí". DEP Ripley.
ResponderEliminarRipley, sigo entrando a verte, a leerte... No soy capaz de evitarlo.
ResponderEliminarDe momento, el saloncito no puede volver a ser el mismo. No sale de dentro; ni la crítica a los políticos, ni las risas, ni las dichosas elecciones segunda vuelta, ni las preguntas sobre viajes de verano, ni la música si no es triste... No tengo el cuerpo, Ripley. No lo tengo aún...
Ahora sólo me apetece escribir en tonalidades grises...
Aún así, intentaré arrancar con fuerza. Lo haré por ti. Por este universo bloguero que cada vez se hace más pequeño, se queda más vacío...
Sí, claro. Te echo mucho de menos.
¿Esperabas otra cosa?
Me vas a terminar llamando pesada...
ResponderEliminar:)
descansa em paz amigo Ripley, descansa em paz...
ResponderEliminarPor Campurriana lo supe. Vuelvo acongojado a este blog y lo confirmo.Todo está dicho, nada consuela.Un gran dolor nos une al través del mundo.
ResponderEliminarEsteban, me mostró tu blog. Me lo recomendó. Supe que me iba a gustar, desde ese momento.
ResponderEliminarUn buen saloncito el tuyo, desde luego...
Ripley tenía ojo ;)
¡Cuánto se le echa de menos!
Sigo pensando en ti, mi querido Ripley.
ResponderEliminarSigo visitando ese cielo oscuro de tu última entrada.
Hoy, por Galicia, también está así.
Por eso te he recordado.
Y por muchas cosas más...
No te conocí, pero sabía de ti a través del Blog de Esteban. Me arrepiento de no haberte visitado y compartido así como lo hicieron tus amigos. Solo me queda por decir que descanses en el viento porque ahora eres parte del Universo.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
Dejo constancia, todavía sin convencerme de los designios del destino (pese a que Adolfo ahora descansa de su martirio) que tras escribir muy someramente sobre su obra y su vida, no encontré nada mejor que linkear desde mi blog el paso a esta página. Con ello quienes no lo conocían, pueden captar desde esta emocionante entrada, toda la calidad humana, capacidad de expresión y apostura literaria, de quién ahora sí reposa en paz, para él cada día más difícil de obtener en vida.
ResponderEliminarEsteban, gracias por hacerme conocer el rincón de este amigo tuyo. Lástima no haber llegado antes.
EliminarTenía luz.
Volveré con tiempo.
Esteban, gracias por hacerme conocer el rincón de este amigo tuyo. Lástima no haber llegado antes.
EliminarTenía luz.
Volveré con tiempo.
Qué bonito, Esteban.
ResponderEliminarA Ripley le encantaría.
Espero, amigo, que estés descansando, al fin, en la paz de la Luz...
ResponderEliminarLe conocí poco y hace poco tiempo, pero el dolor me inspira respeto y su escritura admiración plena en forma y fondo. Lamento su muerte y me quito el sombreo ante su permanente lucha y lúcida consciencia.
ResponderEliminarEste adiós definitivo siempre nos enfrenta de golpe a nuestra absoluta ignorancia sobre lo que de verdad importa y a la soledad del hombre. Quizá Ripley esté celebrando ya el descubrimiento de todos los misterios en ausencia total de soledad y dolor. Así sea.
Le conocí poco y hace poco tiempo, pero el dolor me inspira respeto y su escritura admiración plena en forma y fondo. Lamento su muerte y me quito el sombreo ante su permanente lucha y lúcida consciencia.
ResponderEliminarEste adiós definitivo siempre nos enfrenta de golpe a nuestra absoluta ignorancia sobre lo que de verdad importa y a la soledad del hombre. Quizá Ripley esté celebrando ya el descubrimiento de todos los misterios en ausencia total de soledad y dolor. Así sea.
Es el consuelo que nos queda, Esteban. La muerte, el misterio...la ausencia de dolor...
ResponderEliminarNo sabemos nada...
Aunque soy de las que creo que, después de esto, no hay nada... Al menos, para los que se van...
¿Pesimista? Pues no sé...
Yo tampoco lo sé, Campurriana. Pero quiero creer que algo ha de haber, que la vida va más allá de la de nuestro cuerpo, que este sólo es un vehículo, que tenemos un anhelo innato y universal a trascender nuestra animalidad. Me gusta pensar que somos conductores de cuerpos humanos, que estos, por un motivo u otro, acaban en el desguace algún día, pero no quien les da vida, quien maneja (alma, espíritu...) cambiará de coche, o a otro tipo de vehículo o a una forma inmaterial, seguramente la más pura. No sé...
EliminarCon tu permiso, me tomo la libertad de enviarte un abrazo. Nunca viene mal, quizá no estemos tan solos.
Esteban, estamos acompañados dentro de nuestras soledades. Cada uno tenemos la nuestra. Y, siempre lo pienso: en los momentos mas trascendentales de la vida, estamos solos. Nacemos y morimos solos.
ResponderEliminarDemasiado para esta tarde de viernes.
Gracias por tu abrazo. Me ha encantado.
:)
Me vence el sueño, Campurriana. Pero no quiero abrazarme a Morfeo sin antes hacerlo con vos. El abrazo es terapéutico, reparte cargas, difumina dolores... Siempre es buen aliado de un reparador descanso. Y no se merecen las gracias, el beneficio es mutuo.
EliminarRipley sería feliz leyéndonos. Desde su posición, puede abrazarnos a todos.
ResponderEliminarPues si, estoy totalmente de acuerdo, nuestro cuerpo es un vehículo que cada una de nosotros conducimos y ha veces por caminos no correctos... Y luego hay que dar la vuelta y coger otra ruta. Creo que hay otro mundo otra felicidad.
ResponderEliminarSiento no haber conocido a Ripley. Que Dios le tengo en su gloria.
Un saludo
Pues si, estoy totalmente de acuerdo, nuestro cuerpo es un vehículo que cada una de nosotros conducimos y ha veces por caminos no correctos... Y luego hay que dar la vuelta y coger otra ruta. Creo que hay otro mundo otra felicidad.
ResponderEliminarSiento no haber conocido a Ripley. Que Dios le tengo en su gloria.
Un saludo
Marina, regreso a este rincón porque me gusta leeros.
ResponderEliminarRipley era un torbellino encantador.
Ay Ripley...
ResponderEliminarSi supieses lo que se te echa de menos...
El verano madrileño también te extrañará. Mucho.
Te sigo recordando, mi querido Ripley. He pisado recientemente tus madriles y he pensado mucho en ti. Has dejado huella en la capital que sigue gritando tu nombre.
ResponderEliminarUn abrazo hacia ese cielo.
Me estaba acordando de tí..un abrazo muy fuerte y que te llegue donde estés.....en Murcia mucho calor..y por ahí arriba?.....
ResponderEliminarMe estaba acordando de tí..un abrazo muy fuerte y que te llegue donde estés.....en Murcia mucho calor..y por ahí arriba?.....
ResponderEliminarRipley, no te imaginas la que se te echa de menos. Alp, me alegro de tu visita a mi saloncito. Nuestro vínculo, un amigo común y muy especial.
ResponderEliminarY yo sigo viniendo por aquí casi a diario, aunque no sea capaz de dejar más comentarios, hoy me atreví, aunque sólo sea para que mi comentario acompañe a Adolfo...ains Ripley, cuánto estaríamos hablando tú y yo ahora de todo este panorama político y más avatares. Cada día que pasa te entiendo más y más...un beso hasta el cielo y mi abrazotedecisivo
ResponderEliminarSara, me ha encantado leerte. Yo también sigo pasando. No puedo evitarlo. Siento mis múltiples comentarios pero necesito dejarlos. Es un recuerdo especial para nuestro amigo común.
ResponderEliminarAy, mi querido Ripley...
Hoy sé que te habrías acalorado en mi saloncito, Ripley. Sigo pensando en ti.
ResponderEliminarUn abrazo, Ripley. Tengo la capital muy cerca y un especial recuerdo hacia ti. También, muchos temas candentes de actualidad. Sé que te gustaba hablar de ellos, analizarlos, criticarlos, dejarlos casi sin piel...
ResponderEliminarMe gustaban tus formas casi siempre.
Hoy se nos ha ido Rita Barberá y no veas la que se ha montado. Las miles de Españas salen a relucir. Y muchas más cosas.
Mi querido Adolfo
ResponderEliminarMe ha conmovido enormemente tu escrito. No puedo creer que ya no estés.
Mientras la llama de tu vida se apagaba como el sol de la tarde en las montañas, mi querido hijo renacía, gracias a tus oraciones, a las mías y a las de muchas personas maravillosas.
He aprendido mucho de ti, para mí era un verdadero reto contestar a tus muy elaborados, inteligentes y bien documentados comentarios. Te voy a extrañar cada vez que entre en blogger. Estoy realmente consternada. Debo dejar de llorar, el dolor me mata, ¿qué le digo a mi esposo si me notara la tristeza; lo entendería?
Un gran abrazo lleno de afecto, de agradecimiento y de recuerdos que se agolpan en mi mente. Hasta pronto amigo, descansa en paz.
Shalom
Zijronó liberajá" ("Sea recordado para bendición").
Querido amigo hoy me despido de ti sabiendo que ya estás junto a tu mamá en el Cielo, cuando hiciste esta publicación estaba ausente de los blogs y se me pasó por alto tu despedida, hoy por el comentario hecho por Esteban Lobo al blog de Rud me he enterado de tu fallecimiento, que descanses en paz y que disfrutes de la vida en el Cielo.
ResponderEliminarRud, me has emocionado con tu comentario a nuestro amigo común. ¡Cómo le gustaría a nuestro Ripley!
ResponderEliminarEntrañable.
No conozco tu historia pero sí que he escuchado sobre ella a Ripley en alguna ocasión. Ahora ya he relacionado. De historias duras se aprende mucho, se valora mucho más lo que apenas valoran otras personas que no las han pasado. Mejor no tener que pasarlas, es cierto. Pero también algo (mucho) positivo podemos obtener de lo más duro de esta vida, que sigue siendo preciosa.
Gracias, de nuevo.
Hoy me he vuelto a pasar Ripley, y de nuevo necesito dejarte mi comentario, espero que ya estés descansando con la paz y la tranquilidad más absolutas...hoy que cumplo nueve años en blogger y hace nueve años que entré en contacto contigo... y a través de esos años ha habido de todo, cuántas conversaciones, cuánto tiempo compartido en comentarios, consejos, discusiones, debates, entrevista en aquel precioso blog tuyo...hasta enfado y una reconciliación que me supo a gloria porque llegaba poquito antes de esta entrada...te doy las gracias por todo lo que me enseñaste y compartiste conmigo...hoy quiero celebrar contigo mi noveno cumpleaños en blogger.
ResponderEliminarMi abrazotedecisivo hasta tu rinconcito Adolfo.
Hola Adol. Hace tiempo que no me pasaba por ahí, pero resulta que hoy hace un año que te fuiste y me parece el día justo para volver.
ResponderEliminarTenemos la suerte de que nadie se ha ocupado de hacerte desaparecer de la Red, con lo cual podemos recordarte a ti y a tus fotos y volver a aquellos momentos en que paseamos juntos por el Madrid de los Austrias. Han pasado 7 años de aquello...
En fin, espero que ya estés revolucionando la blogosfera allá donde te encuentres y lo pases fenomenal.
Se te echa de menos. Un abrazo.
Se te echa mucho de menos. Y te he recordado especialmente este mes de mayo, Ripley.
ResponderEliminarCon Madrid, me acerco a ti. Sin Madrid, sigo sin olvidarte porque es imposible.
Yo el día 13 ni pude asomarme por aquí...pero hoy quise pasar por aquí...cómo tú pasabas por ahí, por Madrid, por tus rincones que después compartías con tod@s nosotr@s...allá donde estés deseo que ya sientas la paz, te envío un abrazotedecisivo hasta tu cielo Ripley, mi estimado Adolfo.
ResponderEliminarRipley, sigo pensándote. Últimamente, he desconectado de la actualidad desinformada. Mejor, abrir los ojitos y el corazón. Y no dejarse llevar por los malos sentimientos que provocan algunos hechos. La vida es otra cosa.
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte hacia ese cielo. ¡Cuánto se te echa de menos!
Hola, Adolfo
ResponderEliminarNo te he contado que mi hijo pequeño ya está muy bien. Me ha impactado mucho tu partida y sé, que mientras viva he de acordarme del 13 de mayo como un día muy triste. Te escribo con la intención de no dejar morir tu página. Es increíble, pero recién hoy me he dado cuenta de muchas personas que opinaron en mi blog, y, yo, cuando comencé a publicar nuevamente estaba tan afectada que no me percaté.
No se sabe cuando nos toque, a lo mejor muy pronto nos veamos allá, detrás del arco iris para conversar de temas controvertidos. Hasta pronto.
Un abrazo allá dondé estés.
ResponderEliminarRipley, hoy he entrado en el saloncito después de bastante tiempo. Me he acordado de ti. Siempre lo hago. Sobre todo, cuando surgen temas interesantes, en los que echaré de menos tus ricas y maravillosas aportaciones.
ResponderEliminarUn abrazo, como dice Enrique. Allá donde estés.
Aqui seguimos compañero, repito lo del abrazo allá donde este.
ResponderEliminarPaco, me ha encantado leerte en este rincón de Ripley. Lo que son los blogs y todo lo que crean. Un abrazo.
ResponderEliminarHoy es tu cumpleaños, Ripley Cuánto me sigo acordando de ti
ResponderEliminarHoy me acordé de ti.
ResponderEliminarUn abrazo allá dónde estés.
Un abrazo, Ripley. Se te echa de menos.
ResponderEliminar4 años y medio después sigue habiendo actividad en esta entrada. Nos seguimos acordando de ti aunque no te lo creas.
ResponderEliminarUn abrazo tío. Cuida de los que en estos años hemos mandado para allá, que han sido unos cuantos. Tu ya eres veterano.
Feliz cumpleaños, Ripley. Saca buenas fotos allá donde estés, querido amigo
ResponderEliminar¡Feliz cumpleaños, querido Adolfo!
ResponderEliminarBlogger se ha quedado huérfano sin ti. Me fascinaban tus fotos que todavía puedo pasar a verlas y me alegraban mucho tus comentarios.
Espero que te hayan hecho un banquete do quiera estés. Lo mejor de todo es que ya no sufres, te imagino feliz visitando todas las galaxias y tomando fotos increíbles.
Un fuerte abrazo de Luz, estimado amigo.
Yo también regreso a tu saloncito, Ripley. Sigue siendo cálido, acogedor, enriquecedor. Ojalá, desde ese lugar que habitas ahora, puedas darte cuenta del cariño que has dejado entre nosotros.
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte.
Feliz cumpleaños, Ripley! Hoy, mirando al cielo, brindaré por ti, amigo.
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